Hoy vamos a ver exactamente qué necesitamos para fotografiar el cielo nocturno. Comencemos!
EQUIPO NECESARIO
– Cuerpo de la cámara: Casi cualquier cámara -ya sea digital o analógica- nos servirá para fotografiar el cielo nocturno. Siempre y cuando se puedan realizar ajustes manuales y hacer tomas con exposiciones mayores a 10 segundos.
– Objetivos: Casi cualquier tipo de lente va a ser útil para disparar el cielo nocturno, pero las lentes normales o gran angular son la mejor opción para la mayoría de los disparos. Incluso, a veces nos pueden resultar útiles los teleobjetivos. Lo más importante es que la lente sea tan «rápida» como sea posible (es decir, que tenga una apertura pequeña f/2,8 o más pequeña). Los objetivos zoom también sirven, pero no son por lo general muy «rápidos».
– Filtros: Tenemos que recordar que cualquier filtro, por más barato que sea, es mejor protección que nada (como un UV). Cualquiera que haya golpeado y/o roto un objetivo lo sabe. Sin embargo es recomendable utilizar sólo un filtro que nos ayude a producir la imagen que necesitamos, por ejemplo, un polarizador, un filtro de difusión, filtro ND degradado, etc., y luego asegurarse de que es el filtro de la mejor calidad posible. En última instancia, si queremos proteger la lente mientras no la estamos usando, simplemente colocamos la tapa.
– Tripode: Este es el momento de utilizar un trípode firme. Debe ser lo suficientemente firme como para mantener la cámara fija en exposiciones largas. Tengamos en cuenta que no necesariamente el trípode más costoso es el mejor. Muchas veces, los más económicos son muy buenos.
– Disparador remoto: Puede ser con cable o inalámbrico. Si no tenemos disparador remoto no hay que preocuparse, podemos utilizar el temporizador con el fin de minimizar la vibración, y mantener el obturador abierto durante el período de tiempo deseado.
– Baterías: Las largas exposiciones consumen más energía que las cortas. Por lo que si vamos a hacer varias tomas, nos será necesario cambiar baterías. Debemos de tener al menos dos.
HORA DE LA TOMA
– Montamos la cámara sobre el trípode. Colocamos la sensibilidad al menos a ISO 200, o la ajustamos entre ISO 200 y 800. Hay que tener en cuenta que dependiendo de la cámara que utilcemos, de ISO 400 en adelante, la imagen será notablemente más granulada. (Cuanto más moderna sea la cámara, mejor será la calidad en sensibilidades altas)
– Apagamos el modo de enfoque automático y establecemos manualmente el anillo de enfoque del objetivo hasta el infinito.
– Establecemos la velocidad de obturación a un rango entre 2 y 30 segundos. También podemos utilizar el modo Bulb, dependiendo de las condiciones de luz.
A la hora de decidir la velocidad de obturación que vamos a utilizar, debemos tener en cuenta algo muy importante. Si deseamos que las estrellas queden fijas, o que quede el rastro.
Si deseamos el rastro de estrellas, debemos establecer una exposición más larga (tal vez sea necesario cambiar el ISO a lo más bajo posible, y también cambiar la apertura a un valor mayor).
Y si queremos que las estrellas queden fijas, necesitamos un ISO alto, apertura de diafragma con un valor bajo (mayor apertura). Y para establecer el tiempo hay muchísimas fórmulas. Una muy sencilla es dividir 400 entre la distancia focal a utilizar, y nos dará el resultado en segundos.
– Apuntamos la cámara hacia la zona deseada del cielo, conectando antes el disparador remoto (ya sea con cable o inalámbrico).
– Establecemos la apertura más amplia, el valor f más bajo para nuestra lente.
-Y finalmente disparamos. Una vez que la toma esté finalizada, debemos chequearla para comprobar que el foco y la exposición estén bien. En caso que algo no sea correcto, siplemente lo cambiamos y seguimos disparando!
Soy Fotógrafa Freelance. Escribo en varios blogs, sobre fotografía y edición de imágenes en Photoshop. www.shakiraduarte.com.